En ocasiones, aparecen algunas lesiones en la piel que pueden parecernos algo confusas. Sin duda, tu médico dermatólogo en Valencia puede ayudarte a identificarlas. Aquí vas a conocer más del nevus intradérmico y del nevus compuesto, dos tipos de lunares que en numerosas ocasiones se pueden confundir con una verruga. Inicialmente, debes saber que suelen ser benignos.

Ambos tipos de nevus, anteriormente dichos, no suelen aparecer desde el nacimiento. En ocasiones, son abultados y de un color carne característicos. Muchas veces suelen aparecer en el rostro y especialmente en la espalda a partir de la edad adolescente. Incluso, pueden tener algún pelo en el interior, como bien dice un médico dermatólogo en Valencia.

¿Cómo aparecen realmente este tipo de lesiones? Aparecen normalmente entre la epidermis y la dermis. Sin embargo, conforme pasan los años, pueden ganar volumen y profundizar más en la capa dérmica. Posteriormente, se pasan a denominar “compuestos” (cuando ya se sitúan en la unión dermis-epidermis) y luego pasan a ser intradérmicos (cuando únicamente se sitúan en la dermis).

Suelen perder la capacidad de producir la melanina, por lo que conforme pasan los años se ve únicamente un color carne característico. A veces, también se confunden con fibromas.

Como se ha dicho anteriormente, no implican ningún riesgo para la salud. Además, no tienen por qué eliminarse, a menos que sean antiestéticos y la persona desee retirarlos (por ejemplo, en su rostro).

Cabe destacar que estos dos tipos de nevus pueden tener unas pecas marronáceas o incluso unos vasos sanguíneos. Normalmente, suelen medir entre cinco milímetros y un centímetro de diámetro. Suelen tener una textura suave y son elásticos.

Como puedes ver, no todas las lesiones que parecen extrañas pueden entrañar riesgos para tu salud. Pero, ante cualquier lesión que veas que aparece en tu piel, es clave visitar a un doctor. En Dr. Aliaga Clínica Dermatológica estaremos encantados de ayudarte.